decir que solo por este sintagma «error sostenido, incorporado y lento» merecería la pena
Insurrección del recuerdo no es decir nada pero
el libro está impreso en papel
Ingres cuyo
gramaje tiene
tacto de carboncillo. subo las nueve líneas que me remontan al primer verso del
poema. replico
el primer párrafo omitiendo los dos versos finales como si lo adherido a él se convirtiese así en desechable
No fue error de un día
sino arrastrado sedimento de años
posándose terco
en el ámbito irreal de las verdades a medias,
traspasando la faz del engaño y el sueño vulnerable. Olga Guadalupe
para pasar
página,
dejar la poética: es tiempo de
aritmética o, en tres palabras
Cómo hacer crac (quién me ha robado el
mes de abril)
*
fuera de ese target en papel (feliz
lectora online), todavía adicta al
Babelia de quiosco con el nuevo lastre, a mi pesar, leo que quienes se dicen militantes del
diseño español lucen
piernas Photoshop, cuentan
zapatos por decenas. todo un festival folletinesco:
este sábado me quedo con el apunte de romance literario de
John Carlin
Guillermo y Catalina son una pareja cuyo hábitat natural es el mundo de los hermanos Grimm; Camilla y Carlos no estarían de más en una novela de Tolstói. John Carlin, Mi encuentro con Camilla
que termina por señalar la primacía de los relatos de más fácil digestión, ahora que es
trending topic el duelo papel-pantalla y los
alarmismos por la
supuesta bestialización a la que los nuevos soportes nos someten.
son más serenos
los puntos de vista que apuntan a la mutación.
any way, en la inmediatez intensa que nos embarga, haciendo aflorar
lo tópico
El pensamiento que necesita de la imagen cumple un sueño romántico: la compenetración de la sensación y el concepto, la imaginación y el intelecto. El pensar a través de la imagen en Magritte sería así continuación del camino de la síntesis romántica de Schiller, del francfurtiano Marcuse, del heideggeriano comprender la producción de un mundo a través de los zapatos pintados por Van Gogh; o incluso del primer programa del idealismo alemán. Esteban Ieraldo, LA CONTINUA VISIBILIDAD DE LO INVISIBLE.
*
capas de referencialidad o una cierta parálisis provocada por la
sobreabundancia de
imágenes que nos revela nuestro lado más
Lord Chandos, convertida la cosa en
objeto por aquella mirada que le reclama
una porción de identidad
Porter subvierte los géneros de representación. Sus figuritas ya son representaciones, sus fotografías son representaciones de representaciones, y sus ensamblajes son una simbiosis de las primeras con las últimas que forman un conjunto tan arbitrario como la categoría borgesiana de animales que “pueden ser dibujados con un pincel fino”. Fernando Castro Flórez, El mundo citado por Liliana Porter
...sólo el espejo nos sugiere que apenas le quedan fuerzas para mirar la realidad directamente. Andrés Trapiello, RAMÓN GAYA
barridos visuales que
dibujan el diálogo entre objetos
Las imágenes casi infantiles de Porter guardan una similitud visual y lúdica con las de artistas del Pop Art como Jeff Koons, Keith Haring y Roy Lichtenstein. Pero a diferencia de éstas, las primeras muestran un afán especulativo de incursionar en aporías ontológicas y paradojas de la representación. Es precisamente este afán que las obras de Borges, Magritte y Borges comparten. No obstante, Porter claramente le da al espectador la libertad de completar el espacio entre las comillas que encierran los diálogos o monólogos de sus personajes —independientemente de Borges, de Magritte y de la propia Porter. El mundo citado por Liliana Porter
a través del
fragmento (
a veces)
*
La incontrolada capacidad de las sociedades contemporáneas para emitir realidad ha hecho de ella una pluralidad atomizada de percepciones más o menos perspicaces pero casi todas basadas en la invención, como se construyen las novelas y las películas: con argumentos, con protagonistas, con pasiones atadas o desatadas y por supuesto con intereses prácticos y materiales. El ciudadano construye así su percepción de la realidad necesariamente fragmentaria e incompleta. Jordi Gracia, El intelectual melancólico. Un panfleto
leo escrita junto al título
Pierre Menard autor del Quijote la palabra
APROPIACIONISMO, atestiguando la
razón académica que
me llevó al
relato años atrás.
ella sola es suficiente para
confirmarme el escaso
valor de lo literario para María
Kodama en el
caso remake. apenas hace medio año que aboceté un
post con un artículo de Javier Gomá, almacenado entre los borradores, lo rescato (recorte sin retoque) por oportunismo puro y duro aunque sigue sin convencerme:
lunes 9 de mayo de 2011
de dedos y lunas
un dedo marcando el límite entre la contemporaneidad y la coetaneidad, entre el sujeto y su simulacro
Mientras el contemporáneo señala la Luna, el coetáneo mira el dedo y no la Luna. Javier Gomá, "El dedo y la Luna"
o
un dedo inmensamente próximo al objetivo llena la pantalla desorbitadamente próxima. la distancia entre buscar el
Pont-Neuf de París y el
Pont d'Alma.
*
la instalación de Francesco Jodice proyecta
planos fijos de los visitantes de
El Prado en la
galería Jónica Norte (planta 0) sobre la parte posterior del muro que sustenta la
pintura italiana de los siglos XV y XVI. alguna
ventana intercalada permite incorporar las obras que hay
en la pared de la sala opuesta al recorrido por el pasillo lateral.
es la ubicación de este montaje en el reverso de las piezas el que dota de interés a una obra cuyo principal mérito consiste en hibridar el trabajo de
Thomas Struth y el de
Rineke Djistra. de la
obra invitada (sala 60 planta baja Edificio Villanueva) hay un
boceto oculto contra la pared en la exposición del Hermitage, algo indicado en la cartela pero no
representado.
con esto me sorprende la exposición a la que me ha llevado el Cuadrado negro de Malévich y en la que no deja de resonar Menos que uno de Brodsky.