Mostrando entradas con la etiqueta prunus. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta prunus. Mostrar todas las entradas

domingo, 30 de abril de 2023

Prunus persica (Desires as round as peaches)

sabemos que Gozo es una isla apenas abrimos el libro de Azahara Alonso (2023) para entonces, seguramente ya habremos visto en la cubierta satinada la acuarela de un melocotón: imagen cuyo pronunciado tacto
El tacto es la sensación externa, epidérmica, del mundo pero también la sensación del interior del cuerpo propio. Pablo Maurette El sentido olvidado
visual resalta la textura del papel sobre el que fue pintado por Elsie E. Lower. en mi caso, antes de aparecer la fruta en el texto, la relación entre «gozo» y «melocotón» inicial me sugirió alguna imagen preliminar
Anjla Freija Featuring the 2019 Resort Collection from Preen by Thornton Bregazzi and the poem 'Short Talk on Hedonism' by Anne Carson
por ejemplo, el Desires as round as peaches recitado de On Hedonism (1992) que me lleva a la idea de extranjería en La caída de Roma (2018): a la anfitriona, Anna Xenia, podríamos considerarla, de alguna manera, equivalente a Joe, casero de Gozo. su apellido me emplaza a la página 20 de Economía de lo que no se pierde (2020) donde Anne Carson recoge la definición de ξενία (xenia) en la Grecia antigua de Gabriel Herman:
un vínculo de solidaridad que se manifiesta en un intercambio de bienes y servicios entre individuos procedentes de unidades sociales distintas
y me resulta útil para reflejar la relación entre Azahara, Joe y el melocotón. aunque todo esto suene a cuento, así es como me he visto dando vueltas a la isla para llegar al hueso del trabajo en este nuestro capitalismo, sin sucumbir en el intento
Carla Simón, Alcarràs
el título, breve y poético, es una buena imagen de la labor sincrética y jugosa que se despliega al abrir el libro: narración en la que cada idea, vivencia o sensación aparece acompañada de proyecciones o claves que permiten su extensión o despliegue a medida. nada que ver con el desbordamiento vertiginoso que plantea Ottessa Moshfegh en Mi año de descanso y relajación (2018), ya desde la pirotecnia del título. en principio no es que haya tanta diferencia de métodos y objetivos pero en cuanto a narrativa nada que ver el discurso decimonónico-descriptivo de Ottessa (y esa despreocupación por el sustento
@MargotRot·Aug 18, 2022
Me gusta mucho «Mi año de descanso y relajación» porque es un libro en plan
Me meti 6 orfidales y me puse a ver Cómo entrenar a mi Dragon 3. Drogada y conmovida llamé al gilipollas de mi ex. Después me masturbé. Estoy profundamente deprimida y sigo estando buenisima. Alucino.
Como una oscura bella durmiente embargada de exclusivismo) con la medida hibridación de géneros a la que da vida el de Alonso, performando su estilo sin imposturas

*

(hay algo Liddell en el exceso de Ottessa:
@MargotRot·Aug 19, 2022
Me gusta mucho A. Liddell porque sus libros son en plan
Las palabras jamás estarán a la altura de mi dolor. He entendido el éxtasis divino. Amar es permanecer en silencio. Escupiré a un montón de desconocidos por webcam para demostrarlo. Soy la virgen María, hijos de puta.
que lo hace atractivo —por lo oscuro— pero a mí me resulta insuficiente para engancharme)

*

entre el gozo de degustar un melocotón ofrendado y el deber impuesto de comerse un donuts®, se plantea una relación difícilmente equiparable

*

volviendo a Gozo, lo que pudiera parecer un circunloquio banal, se orienta a documentar la profundidad de ese supuesto vacío. seguir los pasos de este recorrido no desemboca en un despliegue geográfico ni etnográfico sino en un océano existencial y esencial próximo a la Oceanografía del tedio y, como texto, estructuralmente cercano a Marca de agua (trayecto del «An object, after all, is what makes infinity private» de Joseph Brodsky al «PARECERÉ MATERIALISTA, pero hay que reconocer que los objetos importan: ganan espacio al aire y también a la memoria» de Azahara Alonso) e incluso a los Papeles falsos de Valeria Luiselli donde ella recoge esta cita del libro de Brodsky:
Lo que al final queda de un hombre suma sólo una parte. Su parte hablada. Una parte de la oración. Joseph Brodsky
y, más adelante: «Si hay un aspecto infinito del espacio —escribe Joseph Brodsky—, no es su expansión, sino su reducción, aunque sólo sea porque ésta, por raro que parezca, siempre es más coherente. Está mejor estructurada y tiene más nombres: célula, armario empotrado, tumba.»

martes, 28 de marzo de 2023

Bic cristal Prunus armeniaca

cuando Sam Taylor-Wood cambia el bolígrafo de Still Life por un albaricoque en A Little Death es consciente de la particular desazón que provoca una modificación tan pequeña:
Japanese Still Life with Peaches
lo que podría parecer un objeto de atrezzo es una fruta real, incorrupta y solitaria como la hoja de un relato lejano en el tiempo que emerge entre las palabras de tradiciones orientales recién publicadas en español
26 Existe una costumbre denominada ki-nagori, «nagori en el árbol», que consiste en dejar un único fruto en el árbol durante la cosecha de los yuzus, las mandarinas o los caquis. La superstición puede tener varias explicaciones: se deja un fruto simbólico, bien para los pájaros, bien para desear que el árbol rinda el año siguiente (costumbre también llamada kimamori, «guardián del árbol»), bien para que la especie resulte aún reconocible, o bien para asistir hasta el final a los efectos de la estación. Ryoko Sekiguchi Nagori
alejándose por un momento de su foco, Ryoko Sekiguchi, con un razonamiento convincente, reconoce que
La comida industrial reconforta nuestra frágil vida, rodeada de estaciones inestables, porque nos promete que nada cambiará aunque el tiempo avance sin piedad. La comida industrial no conoce el nagori ni tampoco la nostalgia. Nos brinda una posibilidad de refugio, una madriguera cómoda y siempre idéntica a sí misma. Ryoko Sekiguchi Nagori
para finalizar con la sensación de que el desarrollo de estas líneas de resistencia a la putrefacción y otros procesos arrastra fuera de su territorio a comunidades integradas en el medio como la ayorayoreo-totobigosode a quien Paz Encina da voz en Eami:
Paz Encina, Eami
dejarse llevar por la particular materialización del recuerdo llevada a cabo por la directora en este documento poético constituye un buen ejercicio de empatía

*

Constantin Brancusi (1913, 1920)

The Baby's Head, Brancusi (1913)
Recorridos sensoriales que se esculpen en nuestras retinas al tacto de la mirada, siglo XX a través.

*

Barbara Hepworth (1935, 1971)

Sí:
[…] Que el poema
se vaya
que
desaparezca
arrastrando los restos haciendo una espiral hacia lo
inexistente
Ada Salas Arqueologías